Analistas: Seguridad se impuso ante diferencias políticas

Analistas: Seguridad se impuso ante diferencias políticas



Panorama |.- Los encuentros entre el Gobierno Nacional y los mandatarios locales de la oposición, son calificados como una muestra positiva de tolerancia, madurez y respeto político por parte de ambos bloques, que demuestran una intención clara de atender los problemas que afectan a los venezolanos.

Analistas resaltaron la presencia de Henrique Capriles en el último encuentro, luego de haber estado ausente en la convocatoria del pasado 18 de diciembre, cuando estuvieron presentes 68 representantes de la oposición, entre alcaldes y gobernadores.

Jesús Castillo, analista político, considera que la reunión realizada el pasado miércoles en Miraflores representa un paso positivo. “Que el Gobierno convoque y la oposición acuda da a entender que hay un sentido de tolerancia, madurez y respeto”. Afirma que la agenda política no está incluida actualmente, “estamos en una etapa de reconstrucción y de gobernar a todos”.

Castillo destaca que con estas acciones el ciudadano “siente que los gobernantes se están preocupando por los problemas que le afectan, aquí no hay diferencias en el crimen, desempleo, Cadivi, todos son afectados por igual”.

En lo que va de año el presidente de la República, Nicolás Maduro, ha convocado en tres oportunidades a los representantes de la oposición, en esta última, instó a todos los sectores a abrir “las compuertas del entendimiento para que todos podamos aportar verdaderamente. Nos ponemos a la orden”.

En tanto, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, al referirse al encuentro con el jefe de Estado, indicó que con trabajará “con quien sea por la seguridad. Nuestra intención es transparente, el tiempo dirá cuáles son los resultados y esperamos que funcione, porque la seguridad de nuestro pueblo es un tema sagrado y trabajaré con quien sea para ofrecerles seguridad”.

Aunque expresó su intención de trabajar en conjunto, resaltó que debe ser el Gobierno quien garantice políticas efectivas en materia de seguridad.

Sentenció que no se prestará “a que el gobierno con reuniones se lave las manos, tiene que dar respuestas”, dijo Capriles, al destacar los 20 planes contra la inseguridad que se han implementado en los últimos 15 años y que según él no han tenido los resultados esperados por los ciudadanos.

Para Nicmer Evans, analista político, la asistencia de Capriles a esta última reunión es el reconocimiento al presidente Maduro, lo que pone fin al cuestionamiento de mandatario regional sobre la legitimidad del jefe de Estado.

“Que en menos de un mes el Presidente haya hecho tres reuniones con sectores de oposición por diversos temas, refleja que el jefe de Estado está claro en la necesidad de establecer corresponsabilidad en el Gobierno, un error cometido en los períodos anteriores”, asegura Evans.

Aclara que es una evidencia del esfuerzo por entender que el diálogo no necesariamente es la transacción de principios, “no creo que se trate de ningún pacto ni conciliación con la oposición, se está dando ese escenario necesario para la redistribución de las corresponsabilidades en los distintos niveles de Gobierno”.

Otra opinión consultada es la del analista Jesús Silva, quien opina que aunque este primer paso es muy significativo, en la historia reciente se ha visto avances y retrocesos en el diálogo, por lo que espera que esta oportunidad se pueda profundizar y que genere los resultados positivos. “En el sector chavista y no chavista hay una expectativa de que se logre atender los grandes problemas del país”.

Jesús Hernández Godoy, también analista político, refiere que por primera vez la seguridad ha logrado sentar en una misma mesa a los sectores de oposición y del chavismo, acción que a su juicio se debe transformar en medidas específicas y concretas que alivien los problemas de los venezolanos.

“Hasta ahora este avance se ve teórico, esperamos que se transforme en algo práctico, para ello las partes deben reconocerse, están obligadas por el problema de la inseguridad, negarse al diálogo es un costo político que equivale a perder seguidores”, dice Hernández.





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Fuente: Panorama