Pérdidas multimillonarias dejan apagones en Trujillo
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Pérdidas multimillonarias dejan apagones en Trujillo
Pérdidas multimillonarias dejan apagones en Trujillo
|.- Las constantes e interminables fallas en el servicio eléctrico agotan la paciencia de los trujillanos. A la par de lidiar con la falta de alimentos y medicinas, escasez de efectivo, fallas en el transporte público, en la distribución de agua y en las telecomunicaciones; ahora los ciudadanos cargan a cuestas con la pesada cruz de los apagones y alteraciones de voltajes en el sistema eléctrico, los cuales causan pérdidas multimillonarias por daños en los aparatos eléctricos.
Con evidente ira, la ciudadana Adelina Coronado -quien tiene un pequeño negocio de copias y venta de papelería en el sector Plata I de Valera- comentó que producto de los múltiples apagones que se registraron en la ciudad el pasado martes, se le quemaron el aire acondicionado y los bombillos del local. El daño causado por los cortes de energía puso en riesgo la única fuente de ingreso de Adelina, quien comentó que no cuenta con el dinero para reparar el aire, mucho menos para comprar uno nuevo.
Caos eléctrico
El “caos eléctrico” genera una descarga de incertidumbre entre la ciudadanía, ya que las fluctuaciones e intermitencias del servicio, convierten la cotidianidad en una especie de “ruleta rusa”, imposible de predecir y mucho menos de programar. Ante este suplicio, los trujillanos exigen la destitución de los directivos de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), así como también que se realice el mantenimiento necesario a las estaciones eléctricas, para acabar de una vez por todas con la tortura.
Los paisanos ya no creen en las promesas del ministro Luis Motta Domínguez. Lo identifican como el “hombre más negligente del mundo”. A juzgar por los hechos –manifestaron- el blindaje eléctrico que el Gobierno prometió a Venezuela para que se logre un autoabastecimiento del consumo de energía, está lejos de concretarse.
Calvario
En Valera y otros municipios del estado Trujillo se producen apagones hasta 10 veces por día, lo que genera un colapso generalizado. Los semáforos, el sistema de agua, las entidades bancarias, comercios, supermercados y algunos centros asistenciales dejan de funcionar. Las viviendas de muchos trujillanos se han convertido en museos de equipos eléctricos quemados por las alteraciones de voltaje, siendo los más afectados, aires acondicionados, neveras, computadoras y televisores; a los ciudadanos no les queda otra alternativa que “arrumarlos” porque sus reparaciones o sustituciones cuestan millones de bolívares.
En la ciudad capital (Trujillo) pasan hasta 12 horas al día sin electricidad, según comentó el señor Gustavo Núñez. Manifestó que varios de sus vecinos han sufrido pérdidas irreparables en sus aparatos.
César Acevedo, habitante de la Plata IV-Valera, como ciudadano afectado exige a Corpoelec y al Ejecutivo nacional “que muevan las teclas para recuperar el servicio”. Considera pertinente que se haga un mantenimiento oportuno antes que el sistema eléctrico colapse por completo.
Por su parte, Jaime Medina y Andrés Cerrada informaron que en su hogar se averiaron 2 televisores y 2 ventiladores por los apagones y para repararlos deben invertir un dineral. Califican el servicio eléctrico como “desastroso”, creen que pudiera estar peor porque los operadores de las subestaciones de la región están abandonando sus empleos.
“Hay una realidad clara y es que no tienen la capacidad de generar electricidad, reparan obras sin sustentabilidad, en momentos donde la demanda crece”, aseguró otro de los consultados.
Esta situación no aqueja solo a comerciantes, sino también a toda la población trujillana, que tiene que interrumpir completamente sus actividades por la ineficiencia gubernamental.
De viva voz
Gustavo Núñez: “En Trujillo nos quitan la luz hasta 12 horas al día en varios cortes. Un verdadero desastre eléctrico estamos viviendo”.
Cesar Acevedo: “Corpoelec debe esmerarse por mejorar el servicio y hacer las reparaciones y mantenimiento necesarios”.
Jaime Medina: “Deben cambiar los directivos de Corpoelec, empezando por Motta Domínguez, el hombre más negligente del mundo”.
Andrés Cerrada: “En mi casa se dañaron 2 televisores y 2 ventiladores. Repararlos cuesta millones de bolívares”.
William Cheng: “El sistema eléctrico es un desastre. Los apagones están a la orden del día y nadie responde por los equipos.
Fuente: Diario El Tiempo
Foto ©Redpres.com / Redpres Noticias
El “caos eléctrico” genera una descarga de incertidumbre entre la ciudadanía, que a la par de lidiar con el problema económico, ahora debe cargar con la cruz de los apagones y alteraciones de voltajes|.- Las constantes e interminables fallas en el servicio eléctrico agotan la paciencia de los trujillanos. A la par de lidiar con la falta de alimentos y medicinas, escasez de efectivo, fallas en el transporte público, en la distribución de agua y en las telecomunicaciones; ahora los ciudadanos cargan a cuestas con la pesada cruz de los apagones y alteraciones de voltajes en el sistema eléctrico, los cuales causan pérdidas multimillonarias por daños en los aparatos eléctricos.
Con evidente ira, la ciudadana Adelina Coronado -quien tiene un pequeño negocio de copias y venta de papelería en el sector Plata I de Valera- comentó que producto de los múltiples apagones que se registraron en la ciudad el pasado martes, se le quemaron el aire acondicionado y los bombillos del local. El daño causado por los cortes de energía puso en riesgo la única fuente de ingreso de Adelina, quien comentó que no cuenta con el dinero para reparar el aire, mucho menos para comprar uno nuevo.
Caos eléctrico
El “caos eléctrico” genera una descarga de incertidumbre entre la ciudadanía, ya que las fluctuaciones e intermitencias del servicio, convierten la cotidianidad en una especie de “ruleta rusa”, imposible de predecir y mucho menos de programar. Ante este suplicio, los trujillanos exigen la destitución de los directivos de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), así como también que se realice el mantenimiento necesario a las estaciones eléctricas, para acabar de una vez por todas con la tortura.
Los paisanos ya no creen en las promesas del ministro Luis Motta Domínguez. Lo identifican como el “hombre más negligente del mundo”. A juzgar por los hechos –manifestaron- el blindaje eléctrico que el Gobierno prometió a Venezuela para que se logre un autoabastecimiento del consumo de energía, está lejos de concretarse.
Calvario
En Valera y otros municipios del estado Trujillo se producen apagones hasta 10 veces por día, lo que genera un colapso generalizado. Los semáforos, el sistema de agua, las entidades bancarias, comercios, supermercados y algunos centros asistenciales dejan de funcionar. Las viviendas de muchos trujillanos se han convertido en museos de equipos eléctricos quemados por las alteraciones de voltaje, siendo los más afectados, aires acondicionados, neveras, computadoras y televisores; a los ciudadanos no les queda otra alternativa que “arrumarlos” porque sus reparaciones o sustituciones cuestan millones de bolívares.
En la ciudad capital (Trujillo) pasan hasta 12 horas al día sin electricidad, según comentó el señor Gustavo Núñez. Manifestó que varios de sus vecinos han sufrido pérdidas irreparables en sus aparatos.
César Acevedo, habitante de la Plata IV-Valera, como ciudadano afectado exige a Corpoelec y al Ejecutivo nacional “que muevan las teclas para recuperar el servicio”. Considera pertinente que se haga un mantenimiento oportuno antes que el sistema eléctrico colapse por completo.
Por su parte, Jaime Medina y Andrés Cerrada informaron que en su hogar se averiaron 2 televisores y 2 ventiladores por los apagones y para repararlos deben invertir un dineral. Califican el servicio eléctrico como “desastroso”, creen que pudiera estar peor porque los operadores de las subestaciones de la región están abandonando sus empleos.
“Hay una realidad clara y es que no tienen la capacidad de generar electricidad, reparan obras sin sustentabilidad, en momentos donde la demanda crece”, aseguró otro de los consultados.
Esta situación no aqueja solo a comerciantes, sino también a toda la población trujillana, que tiene que interrumpir completamente sus actividades por la ineficiencia gubernamental.
De viva voz
Gustavo Núñez: “En Trujillo nos quitan la luz hasta 12 horas al día en varios cortes. Un verdadero desastre eléctrico estamos viviendo”.
Cesar Acevedo: “Corpoelec debe esmerarse por mejorar el servicio y hacer las reparaciones y mantenimiento necesarios”.
Jaime Medina: “Deben cambiar los directivos de Corpoelec, empezando por Motta Domínguez, el hombre más negligente del mundo”.
Andrés Cerrada: “En mi casa se dañaron 2 televisores y 2 ventiladores. Repararlos cuesta millones de bolívares”.
William Cheng: “El sistema eléctrico es un desastre. Los apagones están a la orden del día y nadie responde por los equipos.
| Diario El Tiempo Trujillo
Fuente: Diario El Tiempo
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