¿Cómo serán los hospitales en el futuro?

¿Cómo serán los hospitales en el futuro?
Agencias |.- Hace unas semanas, se presentó en sociedad una impresora 3D portátil capaz de curar quemaduras y heridas tan profundas como aquellas que atraviesan las tres capas de la piel. La agilidad y precisión que un invento así trae a la medicina es solo una prueba más de la necesidad que la ciencia de la salud tiene de la tecnología para poder avanzar y mejorar sus técnicas.

Los habitantes de las zonas rurales de Arizona (Estados Unidos), por poner otro ejemplo, también empezaron a beneficiarse recientemente de todo el potencial de los drones, unos vehículos pequeños y auto pilotados que muchos utilizan para capturar imágenes espectaculares pero que ahora también sirven para transportar muestras de sangre y, por consiguiente, podrían llegar incluso a salvar vidas.

Por otro lado, la digitalización ha supuesto una transformación absoluta dentro del sistema sanitario. Ya no es necesario confiar en (o intentar descifrar) las notas hechas a mano por un doctor o un enfermero. Tener toda la información del paciente en formato digital permite además que esta pueda ser accedida por cualquier profesional autorizado, de tal manera que los procedimientos médicos se apliquen siempre de forma correcta y estudiada y evitando que perjudique todavía más al enfermo.

Esta revolución digital aplicada a los centros de asistencia médica nos lleva inevitablemente a reflexionar sobre cómo podría ayudar también a reducir gastos innecesarios en los tiempos modernos y poder invertir el dinero en mejorar las prestaciones que se ofrecen en un hospital: más camas y personal especializado, menos horas de espera o, por supuesto, la implementación de la tecnología de última generación.

Pero si ya hemos llegado hasta el punto de que exista la cirugía robótica, es decir, operaciones en un quirófano realizadas exclusivamente por máquinas, ¿qué más se puede esperar en los hospitales del futuro? O, mejor dicho, ¿qué no se puede esperar? Todo apunta a que el progreso tecnológico aplicable en medicina se centrará en hacer que las intervenciones y las pruebas sean menos invasivas, así como en procurar que la estancia del paciente sea lo más llevadera posible con, por ejemplo, las camas inteligentes.

La tecnología, en definitiva, ayuda a salvar vidas, ya sea mediante la detección de enfermedades a tiempo, presentando alternativas a las cirugías con tratamientos menos peligrosos o facilitando la investigación del cuerpo humano en todas sus dimensiones. Mientras algunos se preocupan, seguramente con razón, de las consecuencias directas en nuestra salud de la creciente presencia de ondas electromagnéticas a nuestro alrededor, deberíamos también agradecer el positivo impacto que ha tenido el desarrollo tecnológico en la cura de enfermedades.

| Agencias

Fuente: Agencias