El “FO” del Departamento de Estado EEUU a Henrique Capriles Radonski

El “FO” del Departamento de Estado EEUU a Henrique Capriles Radonski



*Por Er Filósofo de La Pastora

Para algunos de nosotros era previsible, pero la ilusión de la derecha venezolana es proverbial, como audaz es su ignorancia política, con algunas excepciones en la historia. En vez de elegir un populachero como Pablo Pérez e intentar pulirlo después, se lanzaron por uno de sus sifrinos con la esperanza de convertirlo en líder popular.

Inicialmente parecía Pablo Pérez el elegido, por el apoyo brindado en el BOD.

La expectativa fue toda una tarea de autoengaño; porque solo a redomados ingenuos se les pudo ocurrir que podían remontar en el ideario popular la etiqueta de títere “burguesito” que Capriles ya había adquirido con bastante legitimidad. Capriles había sido un experimento más de los laboratorios de la Burguesía, en una generación donde pueden contarse especímenes como Leopoldo López, Armando Capriles, y algunos otros.

Una búsqueda del vellocino de oro que a la Burguesía le ha sido imposible hallar, ni siquiera una pista.

En ese afán, en los últimos años la Burguesía ha tenido que lidiar no solamente con esa generación de militares audaces y corruptos que arribaron con Chávez, sino también con generaciones espontáneas de jóvenes de universidades autónomas que han emergido desde Centros de Estudiantes y Federaciones.

Contra los grupos militares se rompieron las dientes, pero al fin se dieron cuenta que la trayectoria de las charreteras terminaría, terminó y sigue terminando, en jugosas cuentas bancarias; y a los grupos estudiantiles les echaron encima un manto de corrupción, silencio y mediatización, que logró convertirlos en desechos industriales.

La Burguesía ha podido hacer estos juegos de laboratorio, porque en realidad se trazan en cuadernos de contabilidad, junto con otras tantas tasaciones y cálculos de comercio.

Pero juegos que nunca han logrado trascender a la voluntad popular sino por medio de personajes con valor propio de liderazgo que si bien han terminado obedeciendo a los intereses de esa Burguesía, son como animales cerreros que nunca son totalmente domesticados y en sus impulsos levantiscos han llegado a enseñorear y hasta azotar a esa Burguesía que los impulsó, entre coces y dentelladas.

Por eso la Burguesía no ha querido seguir arriesgando demasiado, y entresacó a Capriles, como opción fiel; sin darse cuenta de las terribles debilidades de esa candidatura, no tanto frente a la coyuntura como frente a la historia venezolana misma.

Aun cuando pudiera llegar a cuadrar con la coyuntura (que no lo ha hecho) la candidatura de Capriles es sencillamente anti-histórica, no cuadra por ningún lado con el desarrollo del Estado venezolano, con el grado de conciencia social de sus ciudadanos, ni con las expectativas de las mayorías acerca de su posición histórica relativa en la correlación de fuerzas del poder.

Basta solo escuchar ese discursito rancio y vetusto acerca de la creación de “empleos estables”, para darse cuenta de la desfase absoluta en que se encuentra la Burguesía y su candidato, pensando que a las mayorías populares todavía se les puede oficiar el rol de asalariados al servicio de una élite de empresarios, cuando han penetrado por si mismos el centro del poder y se han dado cuenta, que aunque siguen ajenos a las mieles del poder que ahora saborea una claqué militarista corrupta, lo más importante, que por mayorías tienen fuerza y justificación histórica para asumir el poder por sí mismas con el hallazgo de liderazgos naturales.

Las mayorías populares hoy más que nunca se percatan de las profundas debilidades de un sistema que es sostenido precariamente por las debiluchas columnas de la mascarada electorera de nuestro tiempo (el chavismo-antichavismo), y saben que este sistema es un armatoste podrido que no resiste un soplido de la historia.

Mejor lo habrá diagnosticado el Dpto de Estado, que ha terminado por hacerle el “Fó” a Capriles como alternativa plausible para el imperialismo, y habrá muchos colaboradores en esos edificios que dirige la Sra. Clinton, que prefieren quedarse con Chávez, quien al fin de cuentas siempre les ha garantizado la provisión segura de petróleo, la recirculación monetaria de los petrodólares en la región, además de ser seguro pagador de los intereses de una deuda externa creciente, y promotor de una centrifuga financiera que les proporciona las más altas tasas de rentabilidad bancaria a los prohombres del imperio en Venezuela.

Chávez desde hace tiempo es un “ND”, que son las siglas que el Pentágono le coloca a los expedientes de los líderes populistas de América Latina una vez que firman el pacto borgiano: “No danger”.

El Dpto de Estado no ha ocultado sus opiniones. Con la debida desfachatez ha dicho que en su opinión Capriles no alcanzará a Chávez. Así de simple. A ese “fó” está reaccionando Capriles cuando habló de no permitir injerencia extranjera; no contra Uribe o Santos, quienes solo son procónsules perrunos del Dpto de Estado. Por supuesto es pura bulla; silbidos del que pasa por un cementerio a medianoche, para distraer su miedo.

Curiosamente, CNN ya ha empezado a tirarle ironías a Capriles para ir acomodándose al desaire del Dpto de Estado. La entrevista en Barinas fue una revelación absoluta del Cantinflas que Capriles lleva por dentro. Al preguntarle el periodista cuál sería su prioridad si asume la Presidencia el 13 de enero del 2.013, Capriles alcanzó a responder: Nombrar mi equipo, porque yo soy un hombre de equipo . Sobran los comentarios.

Ya Capriles debe saber con muchos otros, que alguna trapisonda de sus amos le está esperando en cualquier momento, pero no sabe cuál. Por eso el reciente “kikiriqui” de gallo siendo gallina que solo puede cacarear.


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Fuente: NoticieroDigital.com