En Venezuela se culmina una casa cada tres minutos con la Gran Misión Vivienda

En Venezuela se culmina una casa cada tres minutos con la Gran Misión Vivienda

AVN |.- Tres minutos: el tiempo que toma escuchar una canción, esperar el Metro en el andén o lo que tardan en producirse 210 latidos. En ese mismo lapso, en Venezuela se culmina una casa. El hecho ha sido posible por la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV), que ha permitido -desde 2011- que más de 801.399 familias tengan acceso a un hogar digno.

El dato fue ofrecido este viernes por el presidente Nicolás Maduro, quien entregó las llaves de la vivienda número 800.000 a la señora Zulay Estrada, madre trabajadora de la ciudad de Maracaibo, en el estado Zulia, al noroccidente del país. La casa, de 72 metros cuadrados y dos pisos, cuenta con todo lo necesario para el desarrollo y la estabilidad de los integrantes de su familia.

Como Estrada, el sueño de una vivienda propia se ha hecho realidad para miles de familias venezolanas. La meta, al cierre de este año, es llegar a un millón de propietarios y saldar, en 2019, la deuda habitacional acumulada durante la Cuarta República, que se calcula en tres millones de hogares.


Maduro detalló que en promedio, desde 2011 a noviembre de este año, se han construido 480 viviendas por día, lo que equivale a 20 por hora y una cada tres minutos. Sólo este año se han edificado 400.000 casas y en 2016 está prevista la construcción del mismo número de unidades, que se ampliará a 600.000 en 2017. El objetivo de 2018 es llegar al millón de hogares.

"Venezuela ha hecho con la Gran Misión Vivienda Venezuela, en estos tres años, más que en 200 años para la vivienda, el hogar y el hábitat de la familia venezolana", aseveró el mandatario nacional.

Cuidemos los logros


Para este plan de vivienda, el Estado venezolano ha invertido 471.000 millones de bolívares y 73.000 millones de dólares, y destinado 7,9 millones de toneladas de cemento, casi tres millones de toneladas de acero, 24 millones de metros cúbicos de arena, alrededor de 1,9 millones de bloques, 16,5 millones de rollos de cable de 100 metros, 5,6 millones de puertas, 73 millones de metros cuadrados de techos y 9 millones de galones de pintura.

Sólo la cifra en dólares invertida por Venezuela en su programa de vivienda, equivale a más de cuatro veces sus reservas internacionales, pese a que el país ha experimentado en el último año una caída de los precios de petróleo y ha sido víctima de una guerra económica respaldada por la derecha nacional e internacional.

Por esa razón, el mandatario reflexionó sobre la importancia de que en Venezuela gobierne un "socialismo solidario humanista que construye para el pueblo, que protege al pueblo", en contraste con el modelo capitalista que defiende la oposición venezolana.

"¿Qué haría un gobierno de la derecha si el petróleo baja a 35 dólares? Acabaría con todo. Pero nosotros seguimos garantizando la construcción de viviendas, defendiendo pensiones, el derecho al trabajo, las misiones educativas, la salud", enfatizó Maduro, quien llamó a avanzan en las conquistas alcanzadas por la Revolución de cara a los comicios parlamentarios del próximo 6 de diciembre.

"¡Qué nadie se duerma en los laureles! Hay que despertar la consciencia, si no tuviéramos un pueblo despierto no llegaríamos a las 800 mil viviendas (...) El imperialismo está actuando para tumbar el petróleo a 20 dólares, quieren que el pueblo se rinda la mafia de la oligarquía. Cuidemos celosamente lo que hemos venido construyendo", alertó.

Sí se puede


Ante los desafíos que plantea el sabotaje económico de la derecha y el lobby norteamericano que alienta el desplome de las cotizaciones petroleras, el mensaje del presidente Maduro es de optimismo: "¡Sí se puede! Frente a las dificultades actuamos con más trabajo, con disciplina, amor y pasión, para que vean que en todos los ámbitos de la República sí se puede, sí es posible".

"Con petróleo a 40 dólares seguiremos construyendo, porque es un compromiso personal que tengo con el legado de nuestro comandante", expresó el mandatario, tras advertir que la arremetida contra Venezuela también apunta a desestabilizar la región para impedir el avance de los gobiernos de izquierda.

Por eso, el mandatario hizo un llamado de unidad porque "el imperio está entrando en fase de desesperación total" y pretende desvirtuar el proceso electoral del próximo 6 de diciembre en Venezuela. Frente a ese escenario, Maduro instó a los candidatos revolucionarios a "hacer una campaña limpia, pedagógica, movilizadora. Una campaña democrática".

"Doy gracias a Dios que me ha dado fortaleza espiritual y política para superar" los ataques de la derecha "que se han hecho contra mí y contra del pueblo, pero vamos para adelante", agregó.

Asimismo, repudió la campaña mediática impulsada desde la oposición con el fin de desprestigiar los logros alcanzados por la Revolución Bolivariana desde 1999, pero resaltó que la conciencia infranqueable del Poder Popular es la mejor arma para combatir la infamia.

"Nosotros sí sabemos que vale eso. El que no ha tenido nada sabe lo que vale cada cosa que vamos construyendo y conquistando", expresó.

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Fuente: AVN