Universidades privadas aumentaron en más de 30% el costo de la matrícula pero no mejoran servicios

Universidades privadas aumentaron en más de 30% el costo de la matrícula pero no mejoran servicios


ÚN |.- La primera reacción de los estudiantes universitarios suele coincidir: ánimos caldeados, postura de protesta, indignación y desacuerdo. No obstante, frente a las preguntas formales amainan su postura y pasan segunda revista a sus opiniones, que dejan de sonar tan radicales.

Las universidades privadas en todo el país han incrementado sus costos de matrícula trimestral, semestral o anual, que puede ser cancelada a contado o por cuotas y se subdivide por créditos, los cuales pagan el valor de una materia. Hay unas que valen más créditos que otras. De esa forma, el estudiante universitario escoge las materias por cursar, correspondiente al ciclo académico que le concierne y en esa medida aumenta o disminuye el pago que realiza por la educación que recibirá, publica el diario Últimas Noticias en un reportaje especial.

El pago implica el nivel académico, el estado de la infraestructura básica y valores agregados en términos de herramientas de estudio que pueden oscilar en algunos casos entre una pequeña biblioteca y teatros, canchas deportivas y comedores.

El caso de la Universidad Metropolitana (UM), en Caracas, es emblemático por ser el alma máter más costosa de Venezuela (la matrícula oscila entre 25 y 40 mil bolívares). Una mirada más cercana a esa casa de estudios permite entender por qué: va dirigida a un estrato social pudiente, tiene una infraestructura portentosa y amplios espacios deportivos. Pero algunos de sus estudiantes se quejan de fallas en los servicios básicos: agua, papel higiénico y limpieza. De hecho, la única inversión en infraestructura que se ha realizado en 2014 fue la adquisición de una pantalla gigante para eventos deportivos.

Así lo expresó Deiso Araujo, de 20 años y estudiante de Economía y Estudios Liberales, quien considera que el aumento universitario está en total desproporción con los niveles de inflación: “Es un golpe económico para mi familia. El hecho de que la matrícula haya aumentado un 69% afecta duro en el bolsillo. Además, en los baños no hay papel higiénico ni jabón de manos”.

Agnis Orellano, de 19 años, estudia Ingeniería Mecánica y el trimestre anterior pagaba Bs 18.000 por cuatro materias; este semestre, el monto se mantiene pero tuvo que inscribir una materia menos: “Eso restringe mi calidad de vida porque hay que empezar a recortar gastos en mi casa. Pienso que a la UM se le fue un poco la mano con el aumento”.

Otra casa de estudios emblemática, la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab), también incrementó sus precios. Lo informó su rector, padre Francisco Virtuoso, en un video difundido en YouTube: “Estamos obligados a mantener nuestros niveles de excelencia. Las circunstancias económicas nos imponen un aumento de matrícula. Los costos por nómima se cubren mediante este pago, esto es lo único con lo que cuenta la Ucab para cubrir estos compromisos. De cada 100, 86 cubren sueldos, dos material didáctico y 18 a mantenimiento de planta física. Hemos decidido aumentar la matrícula en dos partes: a partir de septiembre un 20% y en marzo de 2015 un 30%”.

Diana Garrido, de 24 años y estudiante de Ingeniería en la Ucab, está en noveno semestre. Afirmó que su primer semestre costó Bs 4 mil y el actual Bs 20.500, el semestre pasado pagó Bs 17 mil y el próximo le tocará alrededor de Bs 25 mil. “Considero que el aumento es alto, pero es difícil saber si es justo porque los parámetros económicos en el país no son claros. Lo que sí es cierto es que en mi vida cada día tendré que restringir más gastos”, aseveró.

Gracia Salcedo, estudiante de cuarto semestre de Comunicación Social en la Ucab, calificó de “excesivo” el aumento. “Acá no todas las personas somos pudientes. En mi caso, mi mamá es sostén de familia, trato de trabajar y este aumento sí se justifica con lo que han subido las cosas en el país, pero afecta mucho”, comentó.

En el interior subió. En las universidades del interior del país también se sintió el incremento matricular. “Estudiar en una universidad privada pasó de ser un lujo a una necesidad”; así coinciden los bachilleres consultados en el Instituto Politécnico Santiago Mariño de Barcelona (Anz). Reconocen que deben trabajar y hasta “matar tigres” para poder cubrir las cuotas semestrales que garantizan su profesión.

Según explicaron los estudiantes, un semestre oscila entre Bs 6 mil y Bs 8 mil, precio que consideraron “pagable” en comparación con otras universidades privadas en la entidad, como la Santa María y Gran Mariscal de Ayacucho, donde las matrículas pasan los Bs 15 mil.

Para Isnaldo Arias, no ha sido tarea fácil. Con trabajo y “matando tigre” ha llegado al sexto semestre de Ingeniería de Sistemas en el Instituto Universitario Politécnico Santiago Mariño. Hoy, a sus 26 años, aún hace “de todo” para cancelar las cuotas semestrales. El salario que gana como auxiliar de farmacia no cubre todas sus necesidades estudiantiles. “Pago seis mil bolívares por cada semestre, pero hay que sumar los libros, materiales, guías y todos los requerimientos de las asignaciones, además del transporte, comida y gastos extras”, relató. Arias aseguró que cada vez se hace más difícil obtener un título en una universidad privada. “Ahorita los más afectados son los nuevos ingresos. En el mes de agosto subieron el precio del semestre”. En la cartelera de entrada a la casa de estudio, se exponen los nuevos costos de las carreras, con una matrícula de 4 mil bolívares y cinco cuotas de Bs 1.100.

Beatriz Chaffardet, que cursa 5° semestre de Comunicación Social en la Universidad Arturo Michelena del estado Carabobo explica su situación: “ Cuando ingresé a la UAM firmé un artículo que dice que el semestre no iba a aumentar hasta que te gradúas. Desde que estoy aquí el semestre sube entre 5 y 10%. Obviamente ningún estudiante dice nada, ni hace huelga por eso. ¡Hay que calárselo, qué más! Comencé pagando tres mil bolívares el semestre y en la actualidad pago 4 mil 700 bs, es decir me han subido mil bolívares en menos de un año. Si los estudiantes no toman alguna medida drástica esto seguirá igual y hasta empeorará”.

La matrícula en la Universidad Rafael Belloso Chacín (Urbe) (Zul) aumenta cada trimestre. Estaba en Bs 2.150 y este trimestre le cobraron Bs 2.350. Hay que pagar por cada unidad de crédito Bs 315 bolívares y el trimestre pasado la cobraron a Bs 274. Una materia puede tener varios créditos. Cristina Villalobos, estudiante de Comunicación Social, manifestó: “El pago en Urbe no está en consonancia con la situación económica que se vive en el país. Los precios son muy altos y, si bien a mí me pagan mis estudios, tengo amigos en los que la realidad es otra y no pueden inscribir todas las materias porque no les da la base”.

Jesús Díaz, estudiante de Ingeniería, declaró: “Yo tengo que trabajar para pagarme la universidad. Aumentan cada trimestre y yo me quiero graduar rápido y no puedo. No puedo inscribir todas las materias porque no me dan los número. Yo lo que gano es sueldo mínimo. En la universidad tengo que ir poco a poco y tengo que inscribir pocas materias por el costo”.

Las principales universidades privadas del país alegan que los costos se han incrementado en función de la inflación, que según la última cifra difundida por el Banco Central de Venezuela es de 63,4%. Según nota de prensa emitida el 2 de septiembre, el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria (Mppeu) no autorizó el incremento del costo de la matrícula estudiantil. Así lo expresó Jehyson Guzmán, titular de ese despacho. Aseveró que las casas de estudio que realizaron los aumentos no consultaron ni fueron autorizadas por el ministerio.

A la Metropolitana se le fue la mano

Benjamín Scharifker, rector de la Universidad Metropolitana (UM), aclaró que son una asociación sin fines de lucro que se sostiene de acuerdo a los fondos que pueda recibir a través de su propia actividad, lo cual implica que el 100% de sus ingresos provienen del pago estudiantil.

El 80% de sus gastos se destinan a pago de personal y nómina. Por eso, afirmó, deben ajustar regularmente el precio de la matrícula.

“En el momento actual tenemos 4.500 estudiantes en total, de los cuales cerca de 300 estudiantes becados completamente no pagan ningún tipo de matrícula. Esto es posible a través de patrocinios que provienen del sector privado. Adicionalmente, más del 12% de nuestra población estudiantil goza de algún tipo de subsidio en el pago de sus estudios superiores y no solo eso, también reciben algún tipo de estipendio para que puedan financiarse las herramientas que van requiriendo en el curso de sus estudios”, explicó.

Sharifker, señaló que deben ajustar sus costos para conservar la calidad educativa.

| ÚltimasNoticias.com.ve/Rafael Hernández /Corresponsalías

Fuente: Últimas Noticias